Recuerdo que todavia no habia terminado el bachillerato, un dia en casa de mi amigo Jose, estabamos jugando videojuegos. En eso, el hermano (en el cuarto de al lado) sale, toma sus llaves y nos dice, voy a comprar unas cosas, vengo en la noche.
Como eran apenas las 3 de la tarde, Jose me llevo al cuarto de su hermano mayor, busco entre la ropa y saco un cassette de VHS. Una porno! me dijo, vamos a verla.
Colocamos el video y comenzamos a ver la pelicula, en ella una mujer entraba en la habitacion de un hombre que la esperaba en la cama, ella se acercaba lentamente, el se sacaba el pene y ella se acercaba a mamarselo. Lo que veia me encantaba, ella estaba vestida con ligueros, medias, pantys y brasiere, todos blancos.
Una vez bien despierto el pene de su amante, ella comenzo a montarlo, en ese momento, Jose, que ya estaba bastante excitado, se monto sobre mi y comenzo a moverse como si me estuviera cogiendo, me lo quite de encima y nos reimos, jajaja, mejor te vas a cojer a otro, jajaja, despues de un momento, me monte yo sobre jose y le devolvi el chiste, jajaja, me dijo, aqui la mujercita eres tu, jajaja y me quito de encima.
Me quede sentado para que no se volviera a montar sobre mi, despues de unos minutos, jose se me coloco detras, sentado con las piernas abiertas, sentia su respiracion en mi nuca, y me apreto por la cintura, riendose, jajaja, ves que la niña eres tu.
En este caso, no me movi, me quede ahi inquieto, y podia sentir el pene de jose que masajeaba con mis nalgas sin quitarnos la ropa.
Poco a poco iba avanzando la pelicula, jose se iba masajeando mas y mas, y yo solo dejaba mi culito ahi para darle placer. No se si llego a acabar, sentimos un ruido, era la mama de jose que regresaba del trabajo. Apagamos la television, guardamos la pelicula y nos fuimos a jugar videojuegos.
En ese momento, me habia convertido en la putica de jose, ya que cada vez que nos veiamos, cada vez que nos quedabamos solos en el ascensor del edificio, el se me acercaba por detras y se masajeaba su pene contra mis nalgas y a mi me encantaba.
Un dia, comenzamos a masajearnos como siempre, y yo queria sentir un poco mas, asi que me baje los pantalones para poderme masturbar mientras el se masajeaba contra mi. En eso, el tambien se bajo los pantalones y me puso el pene entre las piernas.
Que sensacion tan divina sentirlo asi. Me encantaba, sudabamos y nos divertiamos, hasta que se vino entre mis piernas, llenandome todo de semen, no me importo, al momento acabe yo tambien.
Me encanto sentir como acababa entre mis piernas, asi que quedamos en hacerlo cada vez que nos provocara.
Asi fue, Jose fue mi compañero de juegos sexuales por muchisimo tiempo, aunque nunca fuimos mas alla de poner su pene entre mis piernas y acabar con la rica friccion que eso provocaba. Me encantaba quedar lleno de su leche.
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